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Mal aliento

Es muy probable en que en algún momento de nuestra vida nos hayamos sentido avergonzados debido a la reacciona de una persona debido a nuestro mal aliento después de haber comido una deliciosa comida que tenía una gran cantidad de ajo o cebolla, y aunque quitarse ese mal aliento es relativamente sencillo, solo se necesita cepillarse los dientes o usar un enjuague bucal.

 En algunos casos va a requerir algo más y es que el mal aliento (que generalmente tiene un origen bucal), tiene una proporción de pacientes que padece estos problemas por otras causas, como patologías respiratorias o digestivas, por dar un ejemplo.

¿Qué produce el mal aliento?

Como hemos mencionado, el mal aliento o halitosis como también suelen llamarla, se trata generalmente de un problema con origen bucal, pero también tiene otras fuentes. Se calcula que puede haber más de 80 causas que llevan a la halitosis, que pueden clasificarse de distintas formas en función de su intensidad, frecuencia, relevancia clínica o la necesidad de tratamiento. Veamos algunas causas:

 

  • Boca: las bacterias presentes en la cavidad oral provocan necrosis o putrefacción que llevan al mal aliento, generalmente ante la presencia de restos de alimentos y con el apoyo de la sangre, que, según el instituto del aliento, promueve el desarrollo de un tipo de bacterias (‘Porphyromonas gingivalis’) causante de la periodontitis.

 

  • Nutrición y estilo de vida: entre los alimentos más comunes que provocan mal aliento están el ajo, la cebolla, el queso, el huevo y algún tipo de especia, que, al digerirlos, el torrente sanguíneo absorbe sus aceites y los transporta a los pulmones, de manera que el olor se emite a través del aliento hasta que se eliminan por completo del cuerpo.

 

  • Sistema digestivo: aunque los casos de mal aliento asociados con problemas en el aparato digestivo son poco frecuentes, infecciones como la provocada por la bacteria ‘Helicobacter pylori’ puede llevar a sufrir halitosis. También hay casos de vinculación con gastritis, úlceras gastroduodenales, enfermedad inflamatoria intestinal, reflujo gastroesofágico,

 

Como vemos ddeterminar la causa del mal aliento puede ser difícil sin la ayuda de un profesional de la salud, debido a las muchas posibilidades de lo que puede causarlo. Lo recomendable es realizar una cita con su dentista que puede darle un diagnóstico y referirlo a su médico familiar u otro profesional médico, si es necesario.

¿Como podemos evitar el mal olor en nuestra boca?

Uno de los principales métodos para evitar el mal aliento es una buena higiene bucal, que conste de: cepillado de los dientes, uso de seda dental y la limpieza regular de la lengua, así como el uso de enjuagues bucales con antibacterial. Pero también puede resultar efectivo:

 

  • Evitar comidas con exceso de condimentos o los alimentos que provocan mal aliento.
  • Dejar de fumar.
  • No consumir alimentos con mucha grasa.
  • Beber mucha agua.
 

Cuando los consejos anteriores para prevenir el mal aliento no funcionan, es hora de pasar a la acción, es decir, poner un tratamiento porque es posible que se trate de halitosis patológica. Pero debe ser el especialista el que determine por qué surge el problema y cómo solucionarlo. Depende del foco desencadenante de la halitosis, hay que poner un tratamiento u otro.

 

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